¿Cómo son los gatos carey?
La mayoría de los gatos carey son hembras y la probabilidad de que nazca un macho es de 1 en 3000, el cual, será estéril y nacerá con el síndrome de Klinefelter. Se sabe que los gatos Carey son afortunados y mágicos.
Aunque los gatos carey son únicos y hermosos, desafortunadamente muchos no tienen la suerte de tener un hogar, ya que siempre están como última opción en la línea de adopción, al igual que los gatos negros. Muchas veces los humanos se ven perjudicados por su pelaje, puesto que, confunden sus manchas con problemas de la piel, la verdad es que todos los gatos son hermosos por naturaleza y no deben sufrir prejuicios, hagamos que esto no sea más un problema en el futuro.
Leyenda brasileña de los gatos carey
Los dioses la tierra ya habían creado gatos blancos como la nieve y negros como el cielo nocturno, también habían naranjas, grises, marrones e incluso blancos con negro, pero aún no habían decidido quién sería la mascota oficial que representaría a las deidades… así que, como ya habían amado al gato negro mientras la noche se mezclaba con el blanco como la nieve, decidieron dar golpes de luz en un gato negro con colores de oro por todo su cuerpo, haciéndolo una creatura única y extraordinaria, dando origen a nuestras lindas gatas carey (leyenda brasileña traducida por amoralagata.com)
Leyenda hispánica de los gatos carey
Cuentan que hace ya mucho tiempo atrás, el sol decidió que quería participar de la vida en la tierra. Para ello pidió ayuda a la luna para que cubriera su ausencia con el fin de que los humanos no se percatasen de que el astro rey ya no estaba en su lugar. La luna aceptó y tomó la posición del sol de manera lenta pero inexorable, de manera que el Sol deseoso de vivir las experiencias de un mundo que sentía lejano, tomo forma de uno de los animales en los que mejor pasaría inadvertido y que la vez le fascinaba. Eligió una gata negra.Y así paso el tiempo,
El Sol vivió con intensidad aquellos días en la tierra hasta que la Luna, cansada de esperar su regreso decidió retirarse. El Sol tuvo que salir rápido del cuerpo de la gata negra a ocupar su lugar en el cielo, pero en su rápida huida, miles de rayos de luminosos y dorados colores, cubrieron y quedaron atrapados en la mágica piel de la gata negra. Desde entonces las hijas de aquella gata llevan el recuerdo de los rayos y destellos dorados que el sol olvidó en su madre, así como su temperamento y sabiduría (leyenda hispánica).